Tres rusos treparon a Keops pese a
la prohibición y los cercos de seguridad que lo impedían. Realizan esa
actividad en diversos puntos del planeta y toman imágenes inéditas de
los lugares que visitan.
La historia la recoge el diario español ABC.
Allí cuenta cómo dos jóvenes pudieron terminar en la cárcel. Ellos son
“Mister Marat” y dos amigos cuyos nombres no trascendieron.
En su blog
(en ruso), el protagonista cuenta cómo fue la travesía que tuvo que
atravesar para llegar a ese inaccesible tesoro de la humanidad.
“Para
subir a la pirámide, nos quedamos cinco horas escondidos después de que
se hubiera ido el último turista. Tiritábamos de frío”, relata Marat y
agrega: “Trepamos por las losas de piedra de uno de los edificios más
antiguos de la humanidad mientras escuchábamos el eco de la oración en
Giza, y sin darnos cuenta estábamos en la parte superior”.
No es la primera vez que los tres
escurridizos rusos cometen su objetivo sin ser vistos. Recorren el mundo
buscando terrazas de muy difícil acceso desde donde poder fotografiar
ciudades desde ángulos nunca antes vistos.
Marat y sus amigos tardaron alrededor de
veinte minutos en subir hasta lo más alto de Keops y describió la hazaña
como “agotadora”.
“Todo
este tiempo disfrutaba del momento. El corazón latía con fuerza a punto
de cumplir mi sueño más grande. Me quedé sin palabras. Mis ojos vieron
lo que tanto quería. Sentí una alegría escalofriante, la felicidad
absoluta, pero al mismo tiempo, el miedo de que pudiéramos quedar
atrapados. Fugaces momentos de felicidad…”, expresó.
Visto: Periodismo Alternativo.
Funte: Infobae