La mayor
incógnita de todas es quién construyó realmente la Pirámide, ya que
parece imposible que los más de 100.000 trabajadores que supuestamente
construyeron la Pirámide en 20 años fuesen capaces de desplazar bloques
de entre 2 y 60 toneladas a lo largo de 1000 Km. desde las canteras de
Aswan sin vehículos ni ruedas, sencillamente con unos esquís para
deslizarse por la arena. Igualmente parece imposible elevar estos
bloques a una altura de 150 metros sin la ayuda de ninguna clase de
poleas, teóricamente se crearon rampas de arena, aunque no se explica
cómo.
Y el colmo de esta ilógica teoría es la necesidad de colocar un
bloque de piedra cada 3 minutos y medio durante 20 años para terminar la
Pirámide. Además nunca se encontró la momia de Keops dentro de la
Pirámide.Existen 2 explicaciones esotéricas para la construcción de
semejante monumento, ambas se apoyan en curiosidades inexplicables, como
la perfecta orientación geográfica de sus lados, Norte, Sur, Este y
Oeste, así como la orientación de sus pasadizos a diversas estrellas
descubiertas en la era contemporánea, o a los increíbles cálculos
matemáticos de sus longitudes que permiten hallar el número pi, o
calcular la distancia al sol, la densidad de la tierra, su forma y
distancias hasta los polos y el centro de la Tierra.
¿De dónde
extrajeron los egipcios este conocimiento tan preciso?La primera teoría
está basada en la creación por parte de los sabios de la Atlántida de
dichas construcciones, así como de las pirámides incas y mayas. En
teoría el planeta goza de ciclos vitales
de casi 26000 años, y en su punto medio (Año 13000) se logra la máxima
sabiduría, en éste momento se produce un cataclismo y todas las razas de
la Tierra se extinguen. Este cataclismo provocó la destrucción de la
Atlántida, pero sus habitantes, conscientes de la realidad que se
avecinaba decidieron salvar la raza humana, creando así campos
magnéticos especiales que protegieran al ser humano del cataclismo, las
Pirámides serían las construcciones necesarias, y todos los
conocimientos que adquirieron las culturas egipcia, inca y maya fueron
transmitidos por los padres de la Atlántida a las tribus de dichas
zonas, que en lugares extremadamente separados obtuvieron ideas,
concepciones y conocimientos muy similares, de forma casi inmediata, sin
haber sido precedidas por importantes culturas.
Estas teorías afirman
que en el año 2012 llegaremos al final de este ciclo vital de la Tierra,
y pasaremos a la 4ª Dimensión.Por otro lado la teoría extraterrestre es
la que más seguidores tiene y la que se basa en teorías más lógicas o
prácticas, un fragmento cilíndrico de madera que se demostró
científicamente que pertenecía a un bloque de granito que se encuentra
en la entrada y sirvió como sistema de cierre fue encontrado en uno de
los pasadizos de la pirámide, tras ser sometido a la prueba del Carbono
14 se descubrió que el fragmento pertenecía al año 2016 después de
Cristo... ¿Quiere decir eso que viene del futuro? El propio sistema de
cierre de la entrada ha sido analizado y parece que los agujeros para
introducir los cilindros de madera han sido hechos con extrañas brocas
que deberían tener un nivel de Dureza 500, el material más duro conocido
es la vidia, o diamante sintético, y su nivel de dureza es 11. Una
tribu situada al nacimiento del Nilo, y anclada en la prehistoria
llamada Dogones afirma que hace diez mil años, una extraña "arca" de luz
vino del cielo. De ella salieron unos seres mitad pez, mitad hombre
llamados "instructores" y decían venir de una estrella llamada Potoolo
(Sirio B).
Contaban que en ese sistema estelar, había una estrella de
gran magnitud llamada Digitaria (Sirio A) y que Potoolo rotaba al
rededor de Digitaria en un tiempo de 50 años. También decían que una
simple cucharada de la estrella Potoolo, pesaba más que todo nuestro
planeta.La teoría extraterrestre cuenta, en el caso de Egipto, con todo
género de indicios. Simplicio dijo que los habitantes de este país
conservaban observaciones astronómicas de los últimos 600.000 años.
Diógenes Laercio databa la antigüedad de los cálculos astronómicos
egipcios en unos 48.000 años y Marciano Capella decía que estudiaron las
estrellas durante 40.000 años. Pero, por supuesto, los historiadores y
egiptólogos oficiales no aceptan esto, como tampoco las cronologías que
remontan la lista de sus míticos regentes predinásticos a aquella remota
época. La representación más espectacular del firmamento egipcio está
en el techo de una capilla del templo de Hathor Se trata del famoso
Zodiaco circular de Dendera.
El notable egiptólogo y hermetista R.A.Schwaller de Lubicz, demostró que
en este zodiaco se encuentran las pruebas de la antigüedad del
santuario. Consiste en dos círculos de constelaciones, toscamente
superpuestos, centrado uno en el Polo Norte geográfico y otro en el
real, el de la eclíptica, hacia el que señalaría el eje de la Tierra si
no oscilase. El diámetro del zodiaco de oriente a occidente cruza la
constelación de Piscis, evidenciando que se construyó en la era regida
por esta constelación, hace más o menos 2.100 años. Pero un par de
jeroglíficos, en su borde, insinúan la presencia de otro eje que pasa
por el comienzo de la era de Tauro, suceso ocurrido ¡más de cuarenta
siglos antes!.
Ello indica que los egipcios conocían la precesión de los
equinoccios (movimiento de los puntos equinocciales en virtud del cual
se anticipan un poco, de año en año, las épocas de los equinoccios) y
que la tradición religiosa mantenida en el templo de Dendera data de
¡cuatro mil años antes de lo que hasta ahora se ha aceptado!. Pero la
hipótesis de visitas extraterrestres en el pasado que habrían
contribuido al conocimiento de la astronomía adquiere un especial
relieve cuando nos enfrentamos a la Gran Pirámide. Pasando por alto las
numerosas referencias egipcias a sus «dioses instructores», que
merecerían un desarrollo aparte, los datos suministrados por las medidas
de este monumento despejan cualquier duda en lo que concierne a un
conocimiento astronómico y geodésico absolutamente anacrónico para el
que los egiptólogos otorgan a los primitivos moradores de las riberas
del Nilo. Sencillamente, la tecnología de que disponían era claramente
insuficiente para la obtención de tales datos.Según los egiptólogos, las
primeras tumbas faraónicas conocidas son las de la XI dinastía, es
decir, que datan de 2.160 a 2.000 años a.C.
Están situadas frente a
Karnac, en la llanura de El Taraf, al nordeste del Valle de los Reyes y
se abren hacia el oeste, es decir, hacia el Sol poniente. En
consecuencia, las pirámides orientadas al norte no eran sepulturas, sino
templos y, como tales, contenían no sólo la cultura religiosa sino un
conocimiento, adquirido de los dioses, que se plasmó en forma de datos
que relacionaban el monumento con las medidas geodésicas de nuestro
planeta. Han sido muchos los investigadores que han comprobado la
precisión de estos datos.Jomard, que participó en la expedición
napoleónica, extrajo de Estrabón y de Diodoro Sículo la información de
que el apotema de la Gran Pirámide tenía un estadio de longitud, es
decir, 185,5 metros.
Los autores clásicos afirmaban que un estadio era
la sexcentésima parte de un grado geográfico. Según esto, el apotema de
la pirámide multiplicado por 600 nos daría la longitud de un grado en
Egipto. Jomard tuvo en cuenta también la afirmación de Agatárquides de
que la largura de cada lado de la base era idéntica a la longitud de un
minuto (cada una de las sesenta partes iguales en que se divide un grado
de círculo) del meridiano terrestre. Con estos datos se comprueba no
sólo el asombroso conocimiento geodésico del planeta que tenían los
egipcios, sino la premeditada adecuación de las medidas de la pirámide a
las del planeta............
Fuente: veritas-boss.blogspot.com.es