Una casa con supuestos fenómenos en la localidad coruñesa de Portomeiro. Sus habitantes aseguraron que fueron testigo de todo tipo de sucesos extraños desde ruidos, golpes, piedras arrojadas por manos invisibles a combustión espontanea de ropa incluso una supuesta agresión por parte de una fuerza invisible a un cura que trató de bendecir la casa. Tiempo después un periodista de la Voz de Galicia descubre que según varios testimonios lo ocurrido en Portomeiro en 1977 y en 1990 fue provocado por uno de los hijos de la familia. Un polémico asunto en el que unos creen firmemente que fue un montaje y otros aseguran que algo sobrenatural habitaba la casa.