Os avisé hace semanas que la revelación final de Snowden sería la
Verdad del 11-S y os dije que la prueba de que estaba siguiendo el
camino correcto con el reseteo del sistema monetario sería la aparición
de la Verdad del 11-S y también os he advertido que la “carta” que Putin
tenía en la manga cuando la cosa “se pusiera fea” eran los documentos
que, a buen seguro, debía de tener sobre los verdaderos arquitectos de
este autoatentado que cambió el rumbo de la historia.
Bien, pues aquí están esos documentos.
Michael Chertoff, jefe de los ataques del 11-S y responsable de “seguridad nacional”
En la entrevista que podréis escuchar a continuación, el jefe de la web
Veterans Today y es militar, Gordon Duff, comenta con otros ex agentes y
catedráticos (Stew Webb, Preston James, Jim Fetzer) los documentos
sobre el 11-S que agentes secretos rusos y el propio Edward Snowden le
han enviado, recalcando que el motivo de esta revelación es el miedo a
que se vuelvan a colocar bombas nucleares en Estados Unidos, como ya
sucedió el fatídico día del 2001 y ha sucedido recientemenente en
Donetsk, Ucrania rusa.
La primera media hora os la podéis saltar porque se enzarzan en una
absurda pelea con unos debunkers que niegan la importancia de Leo Wanta
(del cual Gordon Duff confiesa que ha actuado como jefe de seguridad).
Como digo, la cosa se pone interesante a partir del minuto 30 cuando
comienzan a revelar los nombres de las personas dentro del gobierno que
organizaron los atentados, aunque más bien habría que decir “cargos”
porque el propio Gordon Duff se salva de nombrarlos directamente, aunque
no su equipo. Y la cosa va en el sentido que adelantamos en el vídeo
“Los eslabones perdidos del 11-S”, obviamente.
Gordon Duff afirma que los documentos que obran en su posesión por
mediación de Snowden prueban que las torres gemelas fueron derribadas
mediante minibombas nucleares (como años atrás en el atentado de
Oklahoma) y que éstas fueron proporcionadas a los conspiradores por el
Director del Departamento de la energía.
Aquel atentado de Oklahoma dio origen a un grupo especial de
investigación del ejército llamado Able Danger que llegó a la conclusión
de que la CIA, el Mossad y los servicios secretos sauditas habían
infiltrado el gobierno norteamericano con una organización denominada
“Al Qaeda” y que sigue viva en la actualidad bajo el nombre de “ISIS” o
“Califato islámico”. Ese grupo Able Danger estaba infiltrado por el
AIPAC, el lobby judío. [Monica Lewinsky fue la agente judía que
colocaron en la Casa Blanca para hacer chantaje a Clinton para que no
investigara el atentado de Oklahoma).
El nombre del primer director de Al Qaeda es el del antiguo director de
la Agencia de Seguridad Nacional, Michael Chertoff (hijo del rabino más
importante de Nueva York); él fue el jefe del ataque del 11-S, junto con
el entonces primer ministro de Israel (y actual), Benjamin Netanyahu,
el alcalde de Nueva York, el propio fiscal que llevó las
investigaciones sobre el atentado (no aclara su nombre pero me imagino
que será John Ashcroft), así como el delegado de la policía en Nueva
York, que "pilló" a varios israelíes con bombas nucleares a punto de
demoler el puente George Washington y ¡los dejó libres!
Asímismo, las
células israelíes querían volar los túneles Holland y Lincoln; y una de
ellas fue detenida por la policía cuando se dio la vuelta en un control.
También los liberaron. Los documentos de Snowden disminuyen el rol que
tanto Bush como Cheney o Rumsfeld tuvieron en el 11-S [aquí discrepo:
puede que no lo dirigieran directamente pero de seguro que estuvieron
implicados en la conspiración].
El grupo de conspiradores “lava el dinero” utilizado en sus atentados
mediante una cuenta secreta de Mitt Romney con conexiones en ¡Cuba! y
chantajea a los diputados por medio de vídeos pornográficos grabados con
prostitutas y niños. De todos estos movimientos, los servicios de
inteligencia tienen vídeos que lo prueban. A cada uno que calló lo que
sabía sobre el 11-S le dieron 20 millones de dólares. Al parecer, esas
cuentas han sido confiscadas y están “controladas”.
El millonario Warren Buffett invitó a los CEOS de las grandes
empresas ubicadas en el World Trade Center a un partido de golf la
mañana del 11-S para que no perecieran en el ataque, por lo que este
hombre es parte de la conspiración.
La mañana del 11-S, altos cargos del Pentágono organizaron una reunión
con los Navy Seals encargados de fiscalizar la desaparición de varios
billones de dólares de su presupuesto, los mismos hombres que estaban
ayudando a Leo Wanta, y colocaron esa reunión en el ala donde impactaría
el misil que acabaría con sus vidas.
En la conversación se menciona varias veces el nombre del General Myers;
entiendo que él fue uno de los traidores dentro del Pentágono que
posibilitaron ese imposible ataque.
Durante los ataques, los israelíes plantaron estaciones de radio para
dificultar las comunicaciones de los cuerpos de seguridad (jammers):
esas estaciones están en posesión de un gran jurado en Houston, así como
una cantidad de evidencias que implican a los conspiradores.
Ahora la pregunta, evidentemente, es quién va a hacer públicos estos datos.
Obviamente, en pocos días vais a tener a Gordon Duff en Rusia Today y,
por lo que se ha visto en los últimos días, es posible que la Fox se
salte por fin la censura y cuente la Verdad.
De cualquier modo, la sincronía de esta esperada revelación con el
proceso de reseteo del sistema monetario hace pensar, a su vez, que éste
último también está a punto de suceder pues, como os vengo contando
desde hace años, la revelación de la Verdad y la liberación del sistema
de dinero-deuda están íntimamente relacionados.
[Una ligera sonrisa empieza a brotar -tras años y años esperando- de la comisura de mis labios].
Fuente: Rafapal.