" LA IGNORANCIA MATA".
Procure estar informado y tener una mente critica.

sábado, 4 de mayo de 2013

Alimentación: La Dieta Blanda.


Dr. Karmelo Bizkarra Maiztegi. Médico.
Es Licenciado en Medicina por la Universidad de Bilbao, ahora universidad del País Vasco, en el año 1979. 

Director médico del Centro de Salud Vital Zuhaizpe en Arizaleta-Navarra. Se ha formado en medicina Psicosomática, en teoría Reichiana, terapia Bioenergética y en medicina Antroposófica. Especialista en Educación para la Salud, se dedica desde el año 1980 a buscar y desarrollar nuevas vías en el tratamiento físico y psicoemocional de la enfermedad, a partir de su formación inicial en Higiene Vital. 

La dieta blanda está especialmente indicada en las personas con problemas digestivos como gastritis, úlcera de estómago o de duodeno, enteritis o colitis. Recomendable en los momentos de crisis del aparato digestivo o en la recuperación de trastornos intestinales que cursen especialmente con diarrea o dolores abdominales.
1. - Zumo de frutas dulces (manzana, pera) y queso fresco (tipo Burgos), requesón, cuajada o yogur colado (para quitar la acidez de este último).

2.- Leche de soja o de almendras (caliente durante el invierno).

A media mañana 

Podemos comer fruta dulce blanda o un yogur colado o un trozo de queso fresco

Comida  día 1º

1.- Zumo de zanahoria y remolacha roja con alguna pequeña cantidad de alguna otra verdura (calabaza, calabacín, apio) o manzana, si se quiere.

2.- Patatas cocidas o al horno con un poco de verdura, patatas cocidas con verduras en puré, o todo en puré. Que predomine siempre la patata sobre el puré. Al puré de verduras le podemos añadir crema de sésamo o de almendras (2 ó 3 cucharadas) cuando lo hagamos con menos patatas o de vez en cuando una yema de huevo). Añadimos aceite crudo, antes de servir.
Sustituimos las patatas por calabaza, boniato o castañas. Al horno o cocidas.

Podemos alternar igualmente por puré de calabacín con patatas o puré de calabaza.

3.-  Alternar: una tortilla suave (francesa, calabacín, guisantes, ); o un trozo de queso fresco o tipo gruyer o emmental o un aguacate.

De vez en cuando un poco de pescado cocido, al horno o a la plancha (nunca frito o con mucho aceite).

Comida 2° día

1.- Zumo de zanahoria y remolacha roja con alguna pequeña cantidad de alguna otra verdura (calabaza, calabacín, apio) o manzana.

2.- Arroz blanco cocido con un caldo de verduras hecho anteriormente o alguna legumbre suave con verduras (lenteja, soja) que en caso de que no sienta bien lo pasamos por el pasapurés.

Alternar el arroz por polenta, tapioca, cuscús, y añadir un poco de puré de verduras para variar el plato. Igualmente podemos comer pan blanco (casero y de buena calidad) con aceite, acompañado de verduras en puré; o untado con aguacate o con crema de sésamo.

3.- Añadir un poco de queso (no fermentado), una tortilla o un poco de pescado. En total tres veces a la semana pescado al horno, cocido o a la plancha. Cuando comamos pescado reducimos también la cantidad de patatas o arroz y aumentamos la verdura.

Merienda

Si tenemos hambre podemos comer un poco de fruta, zumo o yogur.

Cena 1 ° día

1.- Fruta dulce o zumo de fruta (manzana, pera, uva, melocotón) o batido de fruta con yogur (manzana, plátano,... a los que podemos añadir uvas pasas de corinto, dátiles o higos secos (controlar si la pepita del higo seco sienta bien.

Utilizar siempre un yogur no ácido y si es posible hecho en casa con leche de calidad.

2.- Compota de manzana o manzana asada con lácteo ( yogur, queso fresco, requesón). Si queremos añadimos algunos dátiles (naturales y no confitados) o algunos higos secos u orejones puestos a remojo durante unas horas anteriormente.

De vez en cuando podemos cocer la manzana junto con orejones de melocotón y lo acompañamos del lácteo.

Cena 2° día

1.- Zumo de zanahoria o remolacha roja con un poco de manzana si se quiere.

2.- Puré de calabacín, calabaza o patatas con verduras.

Alternar algún día con puré de verduras suaves hecho con copos de avena, trigo o maíz y verduras.
Siempre que el puré tenga mucha fibra lo pasamos por el pasapurés o por el chino.
Alternar con sopa de verduras con tapioca, copos de cereales o polenta.

3.- Añadimos un aguacate, un trocito de queso o una tortilla francesa o de verduras suaves, como la que hemos visto antes.
        
O alternamos, cuando no se come muchas patatas, con un poco de pan blanco de calidad con aceite, aguacate o crema de sésamo.
        
Algún día un poco de pescado.